Capítulo 11. Parte 2.

ZOE.

-¿No?- preguntó con ojos cristalinos.

-Sam, yo... te quiero. Mucho, a decir verdad. Cuando me dijiste que te gustaba una chica pensé que me moría... 

-Tú eres esa chica.

-Ahora lo sé, Sam. Ahora lo sé.

Y dicho esto me besó. Me besó como si le fuera la vida en ello. Como si tuviera miedo de que esto fuese un sueño. Como si por arte de magia fuera a desaparecer. En definitiva, fue el mejor beso de mi vida. 

Ese momento, en el que sentí como sus labios, tan suaves, posarse en los míos fue cuando comprendí que no era un sueño. Que era real. Y que mi felicidad, también lo era.

Capítulo 11. Parte 1.

SAM.

-¿Qué?

-He dicho: ¿Quieres venir al cine?- lo dije con aparente calma, pero por dentro el corazón me iba a mil por hora.

ZOE.

¿Le digo que sí o no?

¿No debería estar enfadada con él? Soy demasiado buena...

-Sí- ese "sí" salió de mi boca sin que lo pensara. Maldita bocazas...

-Perfecto- me dijo con una gran sonrisa- Coge la chaqueta, Sara, que no vamos.

-¡Sí, sí, sí, sí, sí!

***

-¿En qué piensas?- le pregunté a Sam. Estábamos en la sala del cine, viendo una película romanticona a las que se va a ver para meterse mano. Como estaban haciendo Sara y Alex delante. ¿Qué le pasa, joder? ¿No ve que está su hermano detrás suya?

-En que quiero matar a ese tipo.- dijo fulminándolo con la mirada. Pero Alex no se dio cuenta ya que estaba muy interesado en otra cosa. Comerse viva a su hermana.

Bostecé y eché los pies en el cabecero de Alex, dándole "accidentalmente" una pequeña patada provocando que esos dos dejasen de compartir saliva.

-¿Así mejor?

-Gracias. Te debo una.- dijo sonriéndome.

-No es nada. Ahora le veo la gracia a lo de ser carabina. No me extraña que mi hermano me acompañase a todas mis citas.

-¿Fueron muchas?- soltó de golpe. Me sorprendió, porque no esperaba esa pregunta.

-A decir verdad...Bastantes, no tuve muchos novios, ya que Fran me los espantaba todos en la primera cita- reí.

-Otro punto para Fran. Cada día me cae mejor- murmuró para si mismo.

-¿Per...Perdón?-balbuceé.

-Sí, me cae genial tu hermano. Hizo bien, yo tampoco te habría dejado estar con otro chico.

-¿Qué? ¿Por qué?- Oh, vamos, Zoe, ¿aún no lo has pillado? Repetía una voz en mi cabeza.

Se acercó a mí, y a escasos centímetros de mi boca, con la mirada puesta en mis ojos, me dijo unas palabras que recordaría toda mi vida:

-Me gustas. Me gustas mucho. Eres la mejor persona que he conocido, la chica más guapa, lista y graciosa del mundo.

-Tú...-susurré. Él hizo como si no hubiera dicho nada.

-Pero tengo miedo. Miedo de que no te guste. Miedo de que te guste otra persona. Miedo de no ser lo suficientemente bueno para ti. Por eso, es por lo que no te lo había dicho.

-Sam...

-No importa que no me quieras, Zoe. Pero, por lo menos, déjame ser tu amigo.

-¡NO!

Capítulo 10.

SAM.

-Sí. Ella es la mejor persona que he conocido, la chica más guapa, lista y graciosa del mundo.

-Oh...¿y tú le gustas a ella?

-No lo sé.

-¿Por? ¿No se lo dirás?

-Tengo miedo. Miedo a que yo no le guste. Miedo a que le guste otra persona. Miedo a no ser lo suficientemente bueno para ella.

-¿Cómo no le vas a gustar?- preguntó riéndose.- Si eres guapo, gracioso, list...- paró en seco.

-¿Qué?- pregunté con una sonrisa enorme.

-Oh, mierda, lo dije en voz alta.- dijo tapándose la cara con las manos.

-No te tapes. Me encantan tus sonrojos- le cogí las manos y se las quité, dejándome contemplarla.

Ahora me daba cuenta de que estábamos muy cerca y ella me miraba los labios. ¿Quería que la besara? 

Nos fuimos acercando lentamente y cuando  estábamos a punto de besarnos los inoportunos de Jacobo y Dani volvieron.

-Veníamos a ver que pasaba, ya que no se escuchaba nada romperse...

-Um, ya. Voy a ver a Sara- con todo esto casi se me había olvidado lo de la salida al cine.

No hizo falta que subiera a su cuarto, ya que en ese momento ella bajaba por las escaleras.

-Sam, lo siento...Todo lo que dije... me calenté y no sabía lo que decía.

-No pasa nada, Sara- tomé un profundo respiro, como había hecho Zoe, y mientras miraba a ésta de reojo dije- Puedes ir al cine.

-¡¡¿Qué?!!- chilló viniéndome a abrazar.- ¡Eres el mejor hermano del mundo!

-Ahora, ¿no?- reí.- Hay condiciones.

-Umm, ¿cuáles?- dijo cautelosa.

-Aún no lo sé- dije. Y era la verdad, aún no las había pensado.

-Vale, Sam...-dijo Zoe riéndose, al igual que todos. Bueno que pensaban, ¿estaba a punto de besar a Zoe y querían que pensara en condiciones? Cuando estuvo a mi altura le dijo a Sara- Pues, a mí, por ejemplo, las más típicas de mi hermano eran o toque de queda o carabina.

-¿Toque de queda?- chilló Sara- Ni que estuviera en una cárcel...

-Carabina...- intervino Jacobo pensativo- ¿te acuerdas de la primera cita que tuviste,Zoe? ¿Cómo era... Carlos...Carl...?

-Charlie- interrumpió Zoe, toda roja.

-Sí, eso. Pues aquí, el hermanito de ésta fue de carabina.- rió.

-Dios, no me lo recuerdes- bufó Zoe.

-Bueno, no me parece mala idea- dije. Punto para el hermano de Zoe.

-Hermanos- dijeron Zoe y Sara a la vez.

-Choca esa- dijo Zoe, y la chocaron.

-Bueno, ¿por cuál te decantas, hermanito?- dijo Dani imitando a Sarita.

-Toque de queda no, ya que la película acaba tarde...Pues carabina.

-Bien, buena suerte, tío- dijeron Jacobo y Dani.- ¡Adiós!

-Ey, ¿adónde vais?

-Tenemos cosas que hacer.- y se fueron.

-Bueno, creo que ya no hay ensayo...- dijo Zoe haciendo ademán de irse.

-¿Quieres venir al cine?- le pregunté atropelladamente.

Capítulo 8 y 9.

SAM.

Dejé que se fuera. No pude detenerla.
El director fue bueno con nosotros, no nos puso ni siquiera una amonestación, sólo nos echó la bronca y punto.
Hoy es día de ensayo, hoy vería a Zoe. No volví a hablar con ella desde aquella vez. La vi en clases y recreos, pero me rehuía.
-¡Sábado! Adooooooooooro los sábados.- cantó Daniel.
-¿Quién no, Dani? ¿Quién no?
Estábamos en mi habitación. El siempre venía algo antes de la hora del ensayo y charlábamos de trivialidades.
-Ey, ¿estás bien?-me pasó una mano por le hombro en señal de apoyo.
-No sé que voy a hacer si no viene....- Quítate eso de la cabeza, Sam me dije a mi mismo.
-Ya verás como sí que viene, tonto.-dijo- Bueno, ¿quieres jugar a la play?
-¿Para machacarte otra vez?-me reí. Siempre le ganaba.
- JA. JA. Qué gracioso el niñito.
Empezamos a jugar y, cómo no, le gané en todas las partidas. Íbamos por la milmillonésima partida cuando sonó el timbre.
-¡¡Sarita!!- le grité a mi hermana.- Abre la puerta, pooooooooorfis- puse una cara de cachorrito con la que no se pudo negar.
-Dios...-puso los ojos en blanco- estaba arriba, vago.
¡DIN DON!
-¡Ya voy! ¡Ya voy!- gritó.
-Uh, hola.- ¿Zoe? ¡Zoe!
-Hola, Sarita.- dijo una voz que reconocí como la de Jacobo.
-Hola, Jacobo, ¿y esta muchacha?- le escuché a mi hermana.- ¿Es tu novia?-en ese momento estaban entrando al salón donde estábamos Dani y yo.
Los dos se pusieron a reír y me tocó contestar a mí:
-No, no es su novia- cuando hablé, Zoe paró de reír y se me quedó mirando.
-¿Y entonces? ¿Quién es?.- ahí está la cotilla de mi hermana.
-Soy su prima- le respondió Zoe sin dejar de mirarme.
-Bieeeeen...-dijo Sarita alternando su mirada entre Zoe y yo.- Me voy al cine.- cambió radicalmente de tema.
-¿Con quién vas?- le pregunté. Mi padre se había ido de casa, por problemas que no viene al caso, y entonces tenía que cuidar de mi hermanita.
-Con Alex.- dijo ruborizándose.
-Llámale y dile que no vas.- ¿cómo iba a salir mi hermanita con alguien dos años y medio mayor que ella?
-¡¿Qué?! ¡¿Sabes lo que tardó en pedírmelo?!
-Te prohíbo que salgas con él.-dije levantándome.
-¿Que tu qué?
-Te prohí...
-Sam...- susurró Zoe. Me había olvidado de que teníamos público- Déjala ir.
-¡Sí, sí, sí!- chilló Sara.
-¡Qué no!
-¡Tú no eres quien para decidir, Samuel!-se fue escaleras arriba.
Estuvimos un rato en un silencio incómodo, que Dani rompió:
-Jacobo, ¿quieres un refresco?
-Sí, vamos. ¿Vienes, Zoe?
-Adelantaos.
Se fueron a la cocina y yo me senté y empecé a jugar otra vez a la play.
Zoe cogió el otro mando y se sentó conmigo.
Después de un silencio, no muy cómodo, habló:
-Sam... sé que no es cosa mía...- cogió aire y prosiguió- pero creo que deberías dejarle ir al cine.
-Zoe, tú no sabes lo que es tener que cuidar a tu hermana pequeña.... Lo que no es tener a papá aquí.
-Sam... yo no sé lo que es tener padres.- Mierda. La cagué. Me lo había dicho pero no me acordé.- Sé lo que es ser la hermana pequeña con un hermano sobreprotector como tú. Sé lo que agobia, y lo creas o no, ella tampoco tiene a su padre aquí.
-¿Qué?- quería saber sobre su hermano, ya que no nos había contado mucho.
-Bueno, ya sabes que mis padres... pues eso. Pero no sabes que antes de que le pasaran la custodia a mi hermano tuve que estar con mi tío. A partir de eso el se puso en plan "hermano mayor"- dijo eso con los dedos haciendo comillas en el aire.
-No me contaste nada...
-¿Y qué te iba a decir, Sam? Pasado, pisado. Punto. No me gusta pensar en esos días.
-¿Po...por?- tenía un mal presentimiento.
Miró hacia el mando de la play que tenía en sus manos y contestó:
-Eso...eso es otra historia.
-Bien- no la quería hacer sentir mal.
Estuvimos en otro silencio, este más cómodo, que también rompió ella:
-¿La dejarás ir?
Ya casi se me había olvidado de lo que estábamos discutiendo.
-No sé...
-Sam, déjala. Si quieres ponle condiciones. Pero es bueno que salga a divertirse.
-Bien...A mí tampoco me gustaría que no me dejasen ir al cine con la chica que me gusta.
-¿Te...te gusta una chica?
La miré a los ojos, no sabría decir que vi en ellos, por lo que le contesté con la verdad:
-Sí. Ella es...

Capítulo 7. Parte 2.

...

-Ha sido culpa suya- dijo Zoe señalándome con un dedo tembloroso.

-Me da igual de quién haya sido la culpa, fuera de mi clase ahora mismo.

Zoe y yo nos levantamos a regañadientes. Salimos de clase y empezamos a caminar en dirección al despacho del director. Ella intentaba mantenerse alejada de mí dando zancadas, pero como yo era más alto que ella, no lo conseguía.

-Zoe...yo...lo siento mucho- le dije cogiendo su codo para girarla.

ZOE.

-Guárdate tus malditas disculpas, Samuel. Nos echaron de clase y punto.

-Yo no lo decía por lo de inglés...-enarqué una ceja-bueno, por eso también.

-¿Y entonces por qué?-  le pregunté, aunque ya sabía perfectamente  la respuesta.

-Por lo de antes, por lo de la nota...-esperé a que me explicara por qué se comportó así, pero se paró.

-¿Me dirás por qué te pusiste así?

-Yo, bueno...No puedo, Zoe, es complicado...

-Entonces, nada. Pensé que éramos amigos, Sam.- me dí la vuelta y empecé a caminar.

Capítulo 7. Parte 1.

ZOE.

No lo podía creer. No sabía que pasaba.

¿Tan mal estaba pedir una maldita audición? Joder, si él no la quería hacer podía haberme dicho que no. ¿Tanto cuesta decir NO?

Pero nooooooo, tenía que venir y decir que SÍ para luego enfadarse. ¿Quién coño le entiende?

SAM. 

Tuve que huír. No podía estar en la misma habitación que ella.

-Sam, ¿no querías ir a la enfermeria?- dijo Dani inocentemente.

-Ya sabes que no.

-Guao, no me gruñas, eh,tío.

-Déjate de mamonadas.

-Sam...

-Sam, nada, tío.-le interrumpí.

-No, chaval. Hoy me vas a escuchar quieras o no.-dijo elevando la voz- Zoe no tiene la culpa de lo que pasó con Henry, ¿entiendes?

-Lo sé, pero...-intenté interrumpir.

-Shhh, déjame terminar. Zoe pidió la audición porque Jacobo y yo le comentamos las ganas que teníamos de tocar en algún lugar que no fuese un mohoso garaje, y como su hermano es amigo de Henry nos hicieron un favor. -como vió que no decía nada prosiguió- No puedes dejar que eso te preocupe más, no es tu culpa lo que ha pasado, y mucho menos de Zoe.

-Tienes razón...-suspiré.

-Así soy yo.-rió.

-A veces eres un adulto y otras, un niño.

Nos quedamos en un cómodo silencio, que él rompió.

-Será mejor que le pidas perdón...No me sorprendería que no te quisiera hablar.

-Me lo merecería.

-Sí, te lo merecerías.

-Soy una idiota.

-Sí, lo eres.

-Oye...-dije intentando hacerme el enfadado. Me estaba muriendo de la risa con esta situación.-Volvamos a clase.

***

-¿Ya estás mejor o quieres que llamemos a tu casa?-me preguntó la profe, nada más volver.

-Um, sí, estoy bien.

Miré a Zoe,tenía que disculparme con ella, que, casualmente, estaba muy concentrada en su libreta. Yo sabía perfectamente que ella sabía inglés, no tenía por qué atender.

-Señorito, ¿puede sentarse?- me había olvidado de que estaba de pié.

-Sí, profesora.- me dirigí a mi sitio.

-Sigamos...-dijo la profe- Can you the exercice...-dejé de escuchar, no me interesaba.

-Tsss, Zoe- le susurré. Ya no aguantaba más sin que me mirase.

-Zoe...-insistí.

Nada. No hacía caso.

-Joder, Zoe.-dije esto a un tono bastante alto, al mismo tiempo que ella giraba para decirme:

-¿Qué, cojones?

Se escuchó un grito estrangulado procedente del frente de la clase. Giramos, los dos, hacia la profe, que nos miraba con odio.

-¿Cómo se atreven a usar ese lenguaje en mi clase?-casi nos gritó- ¡Al despacho del director ahora mismo!-eso sí que lo acabó gritando.

-¿Qué?...Pero...No...-dijimos al mismo tiempo.

Capítulo 6. Parte 2.

SAM.

-Tío, ¡no puedes decir que no!-gritaron Jacobo y Dani a la vez.

Quizás fue por eso, por su entusiasmo, que dije que Sí.

-¡¡¡¡BIEEEEEEEEEEEEEEEEN!!!!

Ellos se fueron a clase, ya que ya había tocado el timbre, mas Zoe se quedó conmigo.

-¿No vas a clase?-le pregunté. Quería estar solo en este momento.

-¿No vas tú?

-Touché.

-Sam...

-¿Nos vamos?- la interrumpí.

-Sí, claro-murmuró.

Al llegar tarde, la profesora de inglés nos echó un sermón y nos puso un parte. Mierda.

Estábamos en mitad de la clase cuando me pasaron una nota.

-¿Te pasa algo? Z.

-NADA.

-Vamos, tío. Si es por lo de la audición le digo a Lucas que no, y ya.

-Te dije que no pasa nada.

-Pero...- me susurró Zoe. Supongo que se aburrió de esperar a que le escribiera algo productivo.

-Profe, me encuentro mal. ¿Podría ir a la enfermería?- la interrumpí.

-¿Qué te pasa?

-Me duele un poco la cabeza-mentí.

-Bien, pero que te acompañe alguien- buscó con la mirada y dijo- Zoe, ve tú.

-¡No!- grité. Eso era lo menos quería.

-¿No?- me preguntó Zoe. No giré la cabeza, no quería verla.

-Pues ve con Daniel- dijo la profe. Ya se empezaba a impacientar- no tenemos todo el día.

-Vamos-le dije a Dani. 

Y nos fuimos rumbo a la enfermería.

Capítulo 6. Parte 1.

SAM.

-Aún no me puedo creer lo bien que toca Zoe- me venía comentando Daniel.

-¿Qué tan bueno es CSK?

-¿Por?

-No sé... Lo mencionaste el otro día.

-Ese fue el único concurso que ganó por lo que sé y sino, quedaban en buena posición.

-Y nosotros no ganamos ni una rosca...-murmuré.

-Para ganar hay que participar- dijo palmeándome la espalda para darme ánimos.

El resto del camino a clase fuimos en silencio, cada uno sumido en sus propios pensamientos. Ya había pasado una semana desde que Zoe se unió, y he de decir que no sé como hacíamos sin ella.

-Ey, ¿esa no es Zoe?

Miré hacia donde señalaba Dani. Había una chica bajándose del asiento trasero de una moto. Sí, era Zoe. El piloto era un chico, pero como estaba de espaldas no pude verle, sólo vi como le daba un beso en la mejilla a Zoe.

-Eso parece- dios, otra vez celos.

***

-Hey.

-¿Quién era ese?- le pregunté nada más salir al patio.

-¿Quién era quién?-preguntó inocentemente.

-Oh, vamos-puse los ojos en blanco- el de la moto.

-Oh.- se sonrojó- se supone que iba a ser una sorpresa.

-¿sorpresa?- preguntó Dani. Estábamos los cuatro en la mesa de siempre.

-Sí, pero ahora ya no lo es.- suspiró.

-Ahora nos lo dices, jijiji- dijo Dani como si fuera un niñito al que le van a dar una golosina.

-He conseguido una audición para tocar en el bar de Henry. Y ese era Lucas, su hijo.

Todos se habían perdido en la palabra audición. Yo no. Yo me perdí en Henry.

-Pero si no queréis no pasa nada- se apresuró a decir al ver que no decíamos nada- sólo era una idea...

-Dios, prima, ¡claro que queremos!- gritó Jacobo.

-Sí, sí, sí, sí-repetía todo el rato Dani.

-¿Y tú, Sam? ¿Quieres?- preguntó Zoe.

No supe que responder. Así que, me quedé cayado. 

Capítulo 5. Parte 3.

ZOE.

Era una foto de un concurso qua había ganado con mi anterior banda. Sabía que había salido en el periódico de mi ciudad, pero no sabía que fuera de ella también.

-¿Erais bastante famosos, no?- preguntó Dani.

-Qué va. Sólo ganamos ese.- dije restándole importancia. Quería que me quisieran en el grupo por tocar bien, no por ser "famosa".

-Eso es más de lo que hemos hecho nosotros- intervino Sam-Bueno, teníamos pensado que tocaras alguna canción, pero con est...

-Yo quiero tocar- le interrumpí.

Toqué una de mis canciones favoritas. Accidentally Love.

Sam, con Dani y Jacobo detrás, vino y me levanto en el aire mientras repetía cosas que yo no entendí.

-¡Eres lo mejor que nos ha pasado!- me dijo después dejarme en el suelo.

-¿Eso es que estoy dentro?

-Claro que sí.

Practicamos algunas de sus canciones durante un par de horas. Ya era bastante tarde por lo que, Daniel y Jacobo se marcharon, mientras que Sam y yo seguimos recogiendo las cosas.

-Gracias de nuevo. Me estaba volviendo loca tocando yo sola en mi habitación.- le dije.

-Gracias a tí. Éramos una banda que no tocábamos en ningún local porque no éramos muy buenos pero ahora podemos llegar a algo.

-Vamos, hombre, soys buenos.- Bueno, Sam sí. Los otros desafinaban en algún compás pero no era nada que no se pudiera arreglar.

-No sabes mentir- dijo riéndose, y yo le acompañé.

-Bueno, em tengo que ir.

-Adiós, Zoe.- me pareció verle decepcionado. O quizás sólo fue mi imaginación.

Capítulo 5. Parte 2.

ZOE.

El garaje era bastante amplio. En un ricón había una batería, un teclado eléctrico y una guitarra. Allí estaban Dani y Jacobo preparando sus intrumentos. Vinieron a saludarme.

-Bueno, pues esto es todo- dijeron después de hacerme una lista detallada de los día que había que ensayar- ya se que aún no has hecho la prueba pero tenemos esperanzas...

-Bien, mira, yo toco la batería- dijo Dani- Jacobo el teclado y Sam la guitarra.

-¿Guitarra?- pregunté yo, pues yo quería hacer la prueba para eso.

-Uh, sí- dijo el aludido- es que queremos dos guitarras y pues tu también cantas...

-Bien, ¿qué toco?- pregunté.

-Espera, Zoe, una pregunta...-dijo Jacobo- Me contó Sam que estuviste en una banda, ¿quién la formaba? Cuando yo estaba por allí no había ninguna, que yo sepa.

-Ah, sí, cuando te fuiste David, unos amigos y yo creamos CSK.- dije mientras me acordaba de como la habíamos formado...Pero eso es otra historia.

-¡¿CSK?!- gritó Dani.

-Um, sí, ¿por?

-Espera aquí, ahora vuelvo.- dicho eso se fue corriendo y saco algo de su mochila.

-¿Qué le pasa?- me susurró Sam. Yo, simplemente, me encogí de hombros.

-¡Mirad!- Dani traía consigo un recorte de un periódico. 

Capítulo 5. Parte 1.

ZOE.

No me lo podía creer, tenía una audición. Ya les podía haber preguntado antes a los chicos...

Iba de camino a casa, con Jacobo, como siempre.

-¡¿Llegas pronto, no?!- me preguntó Fran, nada más pasar el umbral.

-Sí, los viernes nos dejan salir una hora antes.

-Ok...

-Fran, tengo que decirte algo...

-No me asustes- dijo viniendo desde la cocina - ¿qué pasó? ¿estás mal? ¿no estarás embarazada, no?

-Joder, no. ¿Cómo puedes pensar eso? Soy virg...

-ALTO. Demasiada información. ¿Entonces...?

-¡¡Tengo una audición!!- grité.

-Ah, vale, ya me habías asustado...- murmuró dándose la vuelta- espera, ¡¿dijiste una audición?!

-¡¡SÍ!!

-Felicidades, hermanita.

-Me voy a practicar a la habitación.

Subí a mi cuarto y me puse a tocar con las ganas y el ánimo que ya había perdido hacía tiempo.

Eran las cinco cuando salí de casa. Me dispuse a ir a la casa de Sam.

***

- Hola, Zoe.- Aww, dios, ¿por qué tiene que tener esa magnífica sonrisa?- te estábamos esperando.

-Um, sí, lo siento.- dije mirando el reloj, ya eran las cinco y cuarto - se me hizo un poco tarde. 

-No pasa nada. Pasa.- dijo dejándome sitio para pasar - ensayamos en el garaje. Sígueme.

Capítulo 4. Parte 2.

...


-Sí, bueno, lo que pasa es que yo antes estaba en una banda tocando pero la tuve que dejar para venir aquí. Tenía la esperanza de encontrar otra aquí, pero para que todos ya tienen guitarrista y cantante...
-¿Qu...qué?- balbuceé, estaba sorprendidisimo. Yo que quería invitarle a un ensayo y ahora me dice que toca la guitarra.
-Mmm... ¿conoces a alguna banda que no tenga guitarrista?
-¡Yo tengo una banda!
-¿Quéeeeeeeeeeee?- ella me miró como si estuviera loco. ¿No parece que pueda tener una banda, o qué?
-Sí, joder... Quería decirte si quieres ver un ensayo, pero ahora podrías hacer un prueba. ¿Te va?
- Que si me va, joder, ¡claro que me va!- dijo abrazándome. Sí, sí, abrazándome.
¡RINNNNNNNNNG!
-Será mejor que vayamos a clase.

Capítulo 4. Parte 1.

SAM.

La semana pasó muy rápido y cada día que pasaba me gustaba más Zoe. Me enteré de que sus padres murieron y por eso vive con su hermano.

Hoy es viernes, Daniel me está hablando pero no le escucho ya que estoy mirando hacia la puerta para ver si viene Zoe.

- ¿Sabes? No quiero perseguir a Zoe...-al escuchar eso moví rápidamente la cabeza en su dirección - No tenemos mucho en común, no veo que fuese a funcionar.

-Lo siento, tío- estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para que no se me saliera la sonrisa.

-Deberías pedirle salir.

-¡¿Qué?!

-Vamos, ¿crees que soy tonto?- al ver que iba a decir que sí, dijo- No conestes. Pero veo como la miras...

Bufé. ¿Tanto se me notaba? -Sí, me gusta. No te lo dije porque "te la habías pedido"- dije eso con los dedos haciendo comillas en el aire.

-Eres un buen amigo. ¿Sabes? ¿Por qué no la invitas a un ensayo? Las tías enloquecen por un guitarrista...- dijo guiñándome el ojo.

-Sí, está bien, lo haré.- era una buena idea, la única buena idea que Daniel ha tenido.

Me pareció raro no ver a Zoe en las dos primeras horas, ¿estaría enferma?.

Cuando llegó el recreo fui a hablar con Jacobo para preguntarle sobre ella, pero me contesto que no sabía. Justo en ese momento apareció ella por la puerta.

-Hey, Zoe.- era raro, no tenía su típica sonrisa en su hermoso rostro.

-Hola, Sam.- eso en vez de un saludo fue un suspiro.

Intentamos animarla entre todos pero, al ver que no conseguíamos nada, me la llevé a un ricón para preguntarle que le pasaba.

-¿A mí? Nada. Mira: estoy feliz- dijo poniendo una sonrisa falsa, falsa.

-Já, a mi no me engañas.

-Mmmm.

-Sé que llevamos poco tiempo siendo amigos, pero sabes que puedes confiar en mí, ¿no?

-Sí. Bueno, lo que pasa es...

Capítulo 3.

ZOE.

Mmmm, ese Sam si que está bien. Las siguientes clases me las pasé echando miradas furtivas hacia él. Solté un profundo suspiro.

¡RIIIIIIIIING!

Bien, acabo el día de hoy, me iré a casa con Jacobo, ya que quiere saber donde vivo. Me encanta ese chico, pero solo somos amigos, y tampoco es que quiera más. Es guapo, sí. Inteligente, también. Y muy, muy simpático. Pero no me atrae, además es mi primo...

Pero ese Sam...Mmm. 

-Bueno a ver, es hora de irse- me dice Jacobo.

-Sí espera a que recoja- le digo con una sonrisa.

-Eh, chicos, ¿adónde vais?- ¿cómo se llamaba? Ah, sí, Daniel. Estaba tan absorta con Sam que ni siquiera me fijé en él.

-Uh, Jacobo me va acompañar a casa.

Miré a Sam que venía detrás de Daniel y no sé si fue mi imaginación o en sus ojos vi un atisbo de celos.

-Sí, nosotros, nos vamos. Nos vemos mañana chicos.- les dijo Jacobo y empezamos a caminar.

-¡Adiós!- nos gritaron ellos.

Salimos afuera y emprendimos el camino de vuelta a casa con un silencio cómodo, hasta que Jacobo lo rompió.

-Bueno, ¿qué te ha parecido el insituto?- me dijo con una sonrisa.

-No está mal, pero ya sabes que a mí nunca me gustó ir a clases.

-Lamento que no te hayas podido presentar a la clase.

-No pasa nada, me presentaste a dos.

-¿Y qué te parecieron? Son mis mejores amigos- dijo eso con orgullo y me pregunté que tendrían de especiales.

-Por lo poco que hablamos me cayeron bien, no están mal.- Sobre todo Sam, Dios, ese chico me va a volver loca.

-Espero que os llevéis bien. 

-Yo también lo espero.

-¿Y qué tal está David? Hace mucho que no lo veo- dijo cambiando de tema.

-Ah, bueno, tu te fuiste antes de que empezáramos a ser novios.

-¡¿NOVIOS?!- gritó parándose en seco.

Me reí por su expresión.

-Sí...Novios...- le contesté entre risas.

-Así que al final se te declaró.

Ese fue mi turno para sorprenderme.

-¿Entonces ya sabías que le gustaba? ¿Por qué no me dijiste nada?

-Era mi amigo y me lo contó, sé como guardar un secreto.

-Bien...

Llegamos a mi casa y se la enseñé pero se fue pronto porque tenía que llegar temprano a casa sino sus padres le reñían.

Padres.

Nunca sabré que se siente al tener un padre, no me puedo quejar ya que tengo a Fran, pero me gustaría saber que se siente.

Si ellos estuvieran vivos no nos tendríamos que haber mudado, ni Fran tendría que hacer de padre. Yo sé que le molesta, aunque no me lo diga. Sé que el no tuvo una infancia feliz ya que empezó a trabajar después de las clases para ganar dinero para irnos cuando cumpliera los dieciocho. Que es lo que hicimos.

Mejor no pensar en eso, bueno, es hora de hacer los deberes...

Capítulo 2.

SAM.

-Tío, ¿hoy no venía la nueva?- ese es mi mejor amigo, Daniel, está conmigo en mi banda, Simijaca. ¿Y que significa Simijaca? Pues <cielo azul>. Le puse ese nombre porque "cielo" fue la primera palabra que dijo mi hermana al nacer, y "azul" fue la mía, raro ¿eh?

-Sí, supongo que se perdió o algo.

-Espero que esté buena...

Así es él, solo pensando en eso, a veces me harta, pero todos tenemos defectos.

Toc, toc, toc.

Abrieron la puerta y paso una chica, preciosa, de pelo castaño con ojos marrones casi negros. No muy pálida pero tampoco muy morena. ¿De qué me suena esta chica? Creo que ya la he visto antes...

-Hombre, tu debes de ser la nueva- La nueva...

-Uh, sí, soy Zoe López.

-Perfecto, puede tomar asiento al lado del señor Bravo.

Ella sonrió, ay esa hermosa sonrisa, ¡espera!, ¿dijo "al lado del señor Bravo"? Ay madre, ay madre, ¡ese soy yo! 

Ella fue caminando hasta el pupitre que esta a mi derecha.

-Uh, si que está buena- salté, no me acordaba de Daniel, casi me mata del susto. 

-Es guapa.-murmuré.

-Me la pido.- me dijo con una sonrisa pícara en el rostro.

Eso me dejo un punzada de celos, ¿por qué estoy celoso? No es nada mío.

No la mandaron presentarse en ninguna clase, yo quería saber de ella. Pero los profesores escogieron precisamente este día para llegar pronto y no nos dejaron ni levantarnos del sitio.

¡RIIIIIIIIIIIIIIIING!

Bien, el recreo, bueno me iré a presentar a Zoe.

-Eh tío es mía.- me murmuró Daniel.

-Sólo me voy a presentar...Buuf.

-¡¡Zoe!!- ¿qué...?

-¡Jacobo!- ¿se conocen?

Se dieron un abrazo y empezaron a hablar y reírse. Dios, otra punzada de celos, si no la conozco todavía...

-Yo no sabía que se conocían- le murmuro a Daniel.

-Ni yo- suelta un profundo suspiro y dice- tendré que decirle que ya me la pedí.

Empezaron a caminar hacia nosotros, seguramente para presentarse...

-Hey, chicos.

-¡Qué pasa J!

-Hola Jacobo.- ese yo,enfadado porque viene con ella con toda naturalidad como si se conocieran desde siempre.

-Mira, quiero presentaros a Zoe- de la un beso en la mejilla- mi prima preferida.

-¡¿Prima?!- gritamos Daniel y yo al unisono. 

-Sí- dice Zoe- ¿y vosotros soys...? 

-Yo soy Daniel, encantado, y este de aquí es Sam.

-Encantada chicos.

¡RIIIIIIIIIIIIIIIIIIING!

-¿Qué...? ¿Ya se acabó el recreo?- dice Zoe claramente frustrada.

-Sí, prima, mierda te quería presentar a toda la clase.

-¿Pero solo dura veinte minutos?

-¿En tu otro instituto cuánto duraba?- le pregunto yo. Genial, Sam, lo primero que dices y es tan aburrido.

-¿Eh? Ah, cuarenta, pero porque teníamos actividades y cosas así y nos teníamos que mover de un lado a otro.- dijo encongiéndose de hombros.
-Bueno, chicos, siéntense, la clase va a comenzar.- ninguno se había dado cuenta de que el profesor había entrado así que nos asustamos al oír su voz.

Capítulo 1.

ZOE.

Hace aproximadamente una semana que nos mudamos...

Estoy muy cabreada, ya que tuve que dejar todo atrás: la banda, David, mis amigos... TODO.

Ahora toca empezar desde cero en una nueva ciudad, sola, sin amigos. Mi hermano Fran consiguió un nuevo empleo en el que le pagaban más y por eso nos mudamos.

Nuestra nuevo hogar es una pequeña casa con un trozo de césped, no está mal comparado con el apartamento de antes.

Mañana empiezo el insti y estamos a mediados de diciembre, por lo que me perdí unos cuantos meses de clases. Por lo menos tengo a Jacobo, mi primo, espero nos toque en la misma clase.

¡¡PI PI PI!! 

-Uh, unos minutos más...- murmuro.

-¡Zoe despierta, vas a llegar tarde!

Bueno, ese es mi hermano, Fran, me llevo muy bien con él y estoy feliz porque trabaje en lo que le gusta... pero aún así odio estar aquí.

Me levanto ya que no quiero llegar tarde el primer día, a saber lo que me espera...

Tomo una ducha rápida y me visto en diez minutos, bajo corriendo a la cocina, donde mi hermano me espera con una taza de café sólo. Me encanta el café sólo, me espabila y me da energía para todo el día.

-Bueno, hoy es el primer día... ¿Nerviosa?

-Um, sí, un poco. ¿Tú sabes si Jacobo va en mi clase? - Por favor, por favor, que vaya.

-No tengo ni idea, hermanita, ¿tú quieres que vaya? 

-Hombre como no, es el único al que conozco - además, no es que sea feo, ni nada.

-Ya verás como todos son muy buenos, y seguro que por ahí hay algún grupo de música.

-Ojalá, pero nada se le va a comparar a CSK... Los extraño muchísimo y solo llevo una semana sin la banda.

-Lo siento, pero sabes que apenas podíamos pagar la luz - al ver que yo iba a protestar se apresuró a decir- y no, no quiero gastar el dinero que hacías cuando tocabas en el bar.

-Pero yo no necesito el dinero... podría haberte ayudado.

-Ahora no importa, tengo un buen empleo, ya verás como todo mejora.- y me revuelve el pelo como a una niña pequeña.

-¡Oye! Ahora me tengo que peinar otra vez...

-Cuidado eh, jajajaja.

-Graciosísimo hermanito. Bueno me voy que llego tarde.

-Que la pases bien, Zoe.

-¡Nos vemos a la tarde!- le grité desde la puerta.

-¡Adiós!

Tenía planeado ir caminando hasta el instituto, pero en vez de eso tuve que ir corriendo. Y aún así llegué tarde... Puf.

El insituto era viejo, de piedra, pero aún así muy bonito, me apresuré hasta la clase a la que me habían designado.

Llamé a la puerta y entré. Todo el mundo se que me quedó mirando y el rubor se me subió a las mejillas.

El profesor levantó la vista hacia mí y me dijo:

-Hombre, tu debes de ser la nueva - vaya, genial, "la nueva"...

Simijaca.

¡Hola!
Aquí os dejo un trozo pequeño de lo que os espera. Espero que os guste.

SINOPSIS.

Bueno, a mi me han enseñado que lo primero es presentarse, así que allá voy:

Me llamo Zoe, tengo 16 años y me encanta tocar la guitarra y pasar el rato con los componentes de mi banda (en la cuál también está mi novio, David, que es un bombón y me trata como una princesa). Mis padres murieron en un accidente de coche cuando yo tenía 4 años, y no me acuerdo mucho de ellos. Por lo tanto me cuida mi hermano Francisco, de 27 años, desde que cumplió la mayoría de edad.

Eso es todo por ahora, ¿pero quién supondría que este año todo iba a cambiar?

Nueva ciudad, nuevos amigos, nueva banda, y...¿nuevo novio?